En Ladakh, región del norte de la India en el Himalaya, las carreteras o pistas de montaña son mantenidas por trabajadores que viven a más de 4000 m. de altura con sus familias.
Con solo sus manos y algunas herramientas reconstruyen todos aquellos tramos transitables que la climatología adversa de este lugar destruye.
También las madres, con escobas improvisadas a modo de un haz de palos, barren el ripio de estas carreteras.
Viven,la mayoría bajo una tela con forma cónica, que simula una tienda de campaña, protegiéndolos un poco del frío y de la lluvia.
Los niños de estas familias, como los de la fotografía, pasan el día solos sin prácticamente nada que hacer más que dejar pasar el tiempo mientras regresan sus padres.
Ya ves, esta forma de vida también pertenece a nuestro mundo...
Parece que todos tenemos que ver el mundo de la misma forma...¡Cuántas realidades tan distintas se dan y qué poco sabemos de cada una de ellas!
Imágenes y reflexiones de Miguel F. Martin,
viajero, fotógrafo, escritor y colaborador de este blog
Es cierto que a veces nos olvidamos que no solo existe nuestro mundo conocido
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Y nuestro mundo conocido es vivido, percibido e interpretado de forma totalmente diferente y única, según cada individuo.
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