Cuando me muestro amor, atención, cuidados, dedicación… estoy diciéndome de diversas maneras que me amo, me acepto, me perdono, me importo, me valoro, me gusto, que todo está bien en mi.
Es mi responsabilidad atender amorosamente mi cuerpo, mi salud, mis emociones, mis pensamientos, mi energía, mi Diosa interior…
Me he colocado muchísimas veces la capa de cuidadora de los demás (familia, perro, amigas, hija, compañeros, clientes…) y es maravilloso cuando decides dirigir toda esa atención a ti misma, aunque para empezar sea sólo un ratito al día.
Cuando sientes que mereces tu amor, mereces tenerte en cuenta, mereces ponerte en primer lugar de tu vida, mereces ocuparte de ti y empiezas a tratarte con amor, aceptación, compasión… tus decisiones y acciones son transformadoras y evolutivas.
¿Cómo te sientes cuando te tienes en cuenta, cuando te pones la primera de la fila, cuando te ocupas de tu belleza, tu salud, tu alegría, tu bienestar, tu brillo, cuando te escuchas, te permites Ser?
¿Cómo te sientes cuando te alejas de todo aquello que te bloquea, o oscurece (personas, trabajo, relaciones, alimentos, hábitos de conducta…)?
"Si me amo a mí mismo, expresaré ese amor en mis relaciones contigo y seré impecable con mis palabras, porque la acción provoca una reacción semejante.
Si te amo, tú me amarás.
Si te insulto, me insultarás.
Si siento gratitud por ti, tú la sentirás por mí.
Si soy egoísta contigo, tú lo serás conmigo.
Si utilizo mis palabras para hechizarte, tú emplearás las tuyas para hechizarme a mí."
Miguel Ruiz
Hoy te invito a tenerte en cuenta, a tratarte como tu amor más apasionado, como si fueras tu mejor amiga, tu mejor aliada y mentora.
Se me ocurren algunas ideas para poner en práctica, cuéntame las tuyas y ¡manos a la obra!:
+ Sonreir cada vez que me miro al espejo y decirme que me quiero
+ Escoger alimentos nutritivos y ecológicos para nutrir mi cuerpo
+ Finalizar el día haciéndome un masaje facial con aceite de coco
+ Una lectura motivadora
+ Agradecer todo lo maravilloso que he vivido durante mi día de hoy e ilusionarme con embellecer el día de mañana
+ Imaginar qué quiero crear, sentir y vivenciar en los próximos tres meses y dar un primer pasito para acercarme al objetivo
+ Reservar un espacio semanal exclusivo para mi (un paseo, cine, ir a hablar con el mar, mirar las estrellas y pedir respuestas, un masaje, sentarme en un parque y ordenar mis ideas en una libreta especial, una conversación conmigo misma delante de una taza de té…)
+ Respirar profundamente ante una situación que me incomode y soltar el aire por la boca imaginando que elimino toda la tensión acumulada.
¿Qué harás hoy por ti?
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